miércoles, 4 de enero de 2012

René Daniëls en el Museo Reina Sofía

Inmateriales
Diagramas de la vida

El Museo Reina Sofía presenta en el Palacio de Velázquez una estimulante exposición del artista holandés René Daniëls (1950), coproducida con el Van Abbenmuseum de Eindhoven, la ciudad donde nació el artista. Tiene el carácter de una primicia, pues se trata de la primera muestra de Daniëls en España, un artista que adquirió bastante notoriedad en los años ochenta, en el contexto de las pretendidas reafirmaciones de la pintura frente a las líneas conceptuales del arte. Lamentablemente, su trabajo se vio interrumpido en 1987, al sufrir un derrame cerebral que casi acaba con su vida. En 2007, después de casi veinte años, Daniëls ha vuelto a pintar, aunque ahora tiene que valerse para ello de su mano izquierda, y en más de un sentido puede considerarse como un nuevo inicio.
La muestra presenta una completa reconstrucción de su trayectoria, desde sus inicios en 1976 hasta 1987, y recoge también algunas piezas de los últimos años, tras su recuperación. En ella, podemos apreciar en qué medida la inclusión de Daniëls, en los ochenta, entre los neoexpresionistas alemanes o la transvanguardia italiana resulta inapropiada. La utilización del soporte pintura no se plantea, en su caso, de forma reactiva en contra de los planteamientos artísticos conceptuales. Daniëls sitúa explícitamente su trabajo en lo que él llama poesía visual, que se nutriría de tres fuentes: la poesía, el arte visual y la vida cotidiana. Los referentes que invoca, y que se inscriben intensamente en sus obras, van de Baudelaire, Picabia, Duchamp, Magritte y Broodthaers a la música pop, los discos de vinilo (sonido y forma), o el movimiento punk.

René Daniëls: Dos letras i luchando contra un punto (1985).
Óleo sobre lienzo, 161 x 110 cm.
Stedelijk Museum, Ámsterdam.

A partir de esta constatación, me parece importante destacar algo que la muestra nos permite apreciar ya con una cierta perspectiva. Las pretendidas afirmaciones sobre "la muerte de la pintura" tienen tan poco fundamento como las pretensiones, reactivas, de reconducir las artes visuales por vías exclusivamente instintivas o gestuales. La pintura en la tradición clásica siempre se apoyó sobre presupuestos mentales, y en las sociedades modernas, caracterizadas por la expansión de la tecnología, en lugar de desaparecer se disemina, se hace plural, se mezcla e integra con otros soportes expresivos.

René Daniëls: La musa venal (1979).
Óleo sobre lienzo, 151 x 211 cm.
Museum Boijmans van Beuningen, Róterdam.

Cuando, en 1979, Daniëls da a sus pinturas que representan cisnes en un estanque o mejillones flotantes el mismo título de La musa venal podemos apreciar una aparente discordancia entre lo que vemos y lo que nos dice la leyenda, el título, que acompaña a la obra. Si los mejillones pueden remitir a Marcel Broodthaers, el título es el mismo de uno de los poemas de Baudelaire en Las flores del mal, esa musa expresión de la condición moderna a la que el poeta llama "saltimbanqui en ayunas". ¿Dónde estamos? En un sentido preciso, estamos en la galaxia Duchamp, en una línea de búsqueda de las raíces mentales y poéticas de la significación plástica. La que llevó a Duchamp a utilizar títulos no descriptivos para sus obras, que implicarían lo que él llamó "un color invisible". René Daniëls reivindicó explícitamente la relación de sus obras con Duchamp, en quien subrayaba hasta qué punto había ampliado las fronteras del arte, haciendo más intensa la relación entre arte y vida.

René Daniëls: Hotel (1980).
Óleo sobre lienzo, 55 x 85 cm.
Colección Paul Andriesse.

Hay un cuadro de Daniëls en la muestra: Hotel (1980), de pequeñas dimensiones, en el que vemos una cama solitaria flotando en un mar nocturno de olas agitadas. En el lateral de la cama, una flecha apunta hacia el centro de la imagen, donde se sitúa una de las esquinas inferiores de la cama. En el ángulo superior derecho de la pintura, situadas en un cielo de color marrón oscuro, encontramos dos formas inciertas, pero muy parecidas a la fuente, el ready-made de Duchamp. De nuevo, ¿dónde estamos…? Estamos en el universo de la densidad poética y visual, flotando, tan solos como en una cama de hotel, en el mar de los sentidos abiertos, a los que debemos llegar en nuestro diálogo personal con las obras de arte, que es lo que las completa. Es aquí donde se sitúa el gran interés de la propuesta de René Daniëls: sus obras son diagramas de la vida, en el sentido originario de la palabra diagrama. Dibujos abiertos, diseños mentales de la experiencia.

PUBLICADO EN: ABC Cultural (http://www.abc.es/), nº 1025, 31 de diciembre de 2011, p. 24.
 

3 comentarios:

  1. Arte y vida se confunden,Gracias por la información.Hace tiempo que no viajo a la capital

    ResponderEliminar
  2. Me interesa la relación entre el cuerpo y el espacio. El tiempo seria la tercera variable???.Libros que me eduquen e unspiren. Gracias

    ResponderEliminar